MATRACA. NOBLEZA OBLIGA

Esta es una de nuestras armas principales. Parte de nuestra esencia como Peña, que ha puesto en su sitio a muchos dentro y fuera de la Plaza. Lejos de ser un orgullo personalista, como muchos quieren pensar, tomamos con responsabilidad nuestro sitio en Acho. Por ello, gracias a las reflexiones de algunos aficionados amigos, y otros no tanto, coincidieron en decir, porque habíamos bronqueando al torero Juan Carlos Cubas el pasado domingo.

In situ y luego de ello, explicamos que nosotros jamás habíamos matraqueado al matador. Pues la gran mayoría de la PT10 y muchos sectores de la plaza coincidieron que no merecía el premio de la oreja. Sin embargo las ganas y valor el peruano lo hacían tal vez merecedor a la vuelta al ruedo, por la faena y por la estocada. En ningún momento quisimos ir contra el torero. Quisimos en todo momento sentar nuestra protesta por dos motivos, frenar los pañuelos que ya pedían la oreja injustificada, y luego contra el Juez Carlos Caballero por la desacertada oreja otorgada y peor aun la forma como se la cortaron, luego del arrastre casi con medio toro fuera de la plaza.

Siempre hemos obrado de buena fe. Respetamos a todos los matadores, y la protesta siempre es contra lo que pasó en el Ruedo jamás personal. Así como protestamos, cuando hay algo emocionante, pues aplaudimos y nos dejan desarmados.

Pues bien todo ello nos llevo a una reflexión interna dentro de la PT10. Y luego de una acalorada discusión sopesando el sentimiento que hizo pensar a muchos que habíamos bronqueando al matador. Y nuestro derecho a reclamar, muchas veces tratar de ser el freno a las barbaridades que ocurren en el palco, inducidas por el público que grita ole!, hasta porque paso por el burladero. Pues hemos concluido que debimos haber parado los reclamos cuando pasearon la oreja por la plaza. Y luego retomarlos contra el Juez, que otorgo mal la oreja. Para dejar claro que la protesta no era contra Cubas.

Nobleza obliga me decía un gran maestro hace muchos años. Creo que luego de 4 años de andar como Peña Tendido 10, nos hemos ganado un espacio importante que seguiremos cuidando como lo más sagrado, a pesar de nuestra impetuosa juventud.