OTRO JUEZ, OTRO JUEZ, OTRO JUEZ

Fuente: http://manifiestoaficionados.blogspot.com/2010/08/los-presidentes-son-conscientes-del.html

LOS PRESIDENTES SON CONCIENTES DEL FRAUDE Y DEBERIAN ACTUAR YA

Reproducimos íntegramente el escrito publicado por la Asociación Nacional de Presidentes de Plazas de Toros de España (ANPTE), en su página web, en apoyo y reivindicación de la actuación de su colega en la Plaza del Puerto de Santa Maria, D. Rafael Sestelo, el pasado 8 de agosto, ante la actitud de los figuras acartelados -Morante, El Juli y Cayetano-, con sus apoderados al frente -Roberto Dominguez y Curro Vázquez-, negándose a torear si no se aprobaban los toros que habían elegido para la función de esa tarde. Pero más allá del apoyo y reivindicación de su compañero, lo realmente interesante del escrito es la reflexión que hacen el colectivo de presidentes sobre el FRAUDE que corroe la Fiesta de lo Toros en todos los niveles y que amenaza, a no muy largo plazo, su ruina total. Si tal es la clarividencia del colectivo de presidentes sobre la situación de la Fiesta, deberían tener claro que ellos son parte del problema y, por tanto, parte de la solución. Si las posiciones que defienden fueran la norma de todos los presidentes en todas las plazas y no consintieran las actuaciones fraudulentas de los negociantes del toro, otra muy distinta sería la situación de la Fiesta de los Toros. Si de verdad creen lo que dicen en el escrito que firman y que reproducimos a continuación... pónganse manos a la obra ya.

"Reivindicación de un Presidente que estuvo en su sitio" "Repasemos, enemigos exteriores de la tauromaquia : Zafios prohibicionistas y energúmenos de flácidas lecturas, patéticos aspirantes a totalitarios creando su particular campo de exterminio con el mundo del Toro, vividores del cuento y de la subvención identitaria, políticos del todo a cien, estadistas de baratillo y suma y sigue; pero el problema lo tenemos y mucho dentro de nuestra propia casa, no miremos para otro lado, aquí y ahora se llama FRAUDE; léase engaño o adulteración de la esencialidad de un espectáculo que transciende este concepto para sublimarse en el arte y en la historia; ¿Que es una corrida sin emoción, sin el palpito del toro integro, encastado y bravo?; ¿que queda si privamos a las corridas de esa fuerza telúrica y oscura sometida en el circulo mágico por el hombre, encarnación divina y corona de la naturaleza?; prodigioso ballet de arte y misterio siempre renovado en el mágico ruedo. Todo esto es así en su profundo simbolismo oculto, el arcano del toreo siempre será tan incomprensible para necios como sublime para los que tengan visión y capacidad para penetrar en la aparente superficialidad de las cosas. Ahora descendamos al día a día, toquemos suelo, mortificante cotidianidad, pregunta, ¿Qué queda del toro bravo?, ¿vamos al monoencaste?, ¿de la bravura al vacuno?. ¿toros publicitado a gusto de quien?. Veamos, toro “publicitado”; ya sabemos, toro creado para la estética de la muleta, el sopor y por lo visto últimamente la crónica flojera; ¿cuantas ganaderías son rentables?; ¿el que se arriesga no sale en la foto?; ¿Qué ocurre con algunos arrinconados encastes objeto de culto para los aficionados?; ¿Quién impone la tiranía de lo que sale a las plazas?. Muchas y variadas preguntas; culpables, ¿Quiénes?, ¿empresarios, ganaderos, aficionados de estomago ancho, las figuras?. Si esto fuera el juego del millón, jugamos y acertamos con la respuesta, casi seguro.

Pasemos a centrarnos en el enunciado del presente editorial; corrida del Puerto de Santa María el día ocho de Agosto; presidió D. Rafael Sestelo; cartel repleto de figuras y comenzamos; desembarque y corrida de Zalduendo rechazada. Lo que sigue de dominio publico, sabido y repetido…. baile de corrales, zapatiesta y algarabía vocinglera con amenaza de plante incluido; vamos lo normal y algo más. Previo, definamos rangos, jerarquías y principios; el de cualquier Presidente inapelable, así tenemos por si le suena a alguien, lo siguiente: “Los espectadores tienen derecho a recibir el espectáculo en su integridad……………”; otro y mas de lo mismo: “Las reses destinadas a corridas de toros o de novillos con picadores deberán, necesariamente, tener el trapío correspondiente, considerado éste en razón a la categoría de la plaza, así como el peso y las características zootécnicas de la ganadería a que pertenezcan”. Aún en la aberrante ensalada y proliferación reglamentista, no hay reglamento autonómico que no sacralice estos principios que legitiman todo lo demás; dicho esto, entremos en liza, abramos boca con la nota difundida por los toreros y sus cuadrillas. “Los toreros y las cuadrillas anunciadas para esta tarde en El Puerto de Santa María van a torear por respeto y responsabilidad ante la afición y la empresa a pesar del autoritarismo evidente y de la arbitrariedad del presidente y de su equipo veterinario en el reconocimiento y rechazo de los toros. Advirtiendo además que los toros aprobados finalmente tienen menos trapío y menos peso que los toros rechazados ayer de forma arbitraria. También hacemos saber que hemos recibido llamadas del propio presidente disculpándose por este asunto.” Rotundo, eso no es correcto, es inexacto y manipulador, pura y dura falsaria extensible a lo que esta sucediendo en muchas plazas, máxime las mas vulnerables de segunda; fraude puro y duro o si se quiere utilizar un eufemismo “adulteración del espectáculo”. Hablamos de la imposición por parte de los príncipes del escalafón -.léase figuras- o sus apoderados -tanto da- de ganaderías, condiciones y demás protocolos de actuación, casi siempre nocivos para el aficionado e imposible para los presidentes y presencias serias. Truculenta interpretación; o cambiaron el objeto, o cambiaron de ojo, o las gafas eran de hormigón armado. Veamos, descripción misericordiosa del anoréxico y flácido desembarque de la corrida de Zalduendo anunciada en los carteles: “9 becerros, sin cara, morrillo, trapío ni cuernos.”. Es decir, ¡Señores, esta corrida no debía de haber sido embarcada nunca! y eso es !responsabilidad exclusivamente suya y del empresario!. Otra vez la política del trágala, si esta vez no salio es porque había un Presidente en su sitio, así de simple.

Cuesta diseccionar lo veraz ante tanta fetidez manipulativa; incluso algún titular nos remitía a la religiosa expiación del contrito Torralba, muestra: El presidente “pide perdón” y la corrida de El Puerto se celebrará. (Fuente Burladero / Noticias). Lo dicho, todos beatos de la noche a la mañana. Sigamos, recurramos a la paremia popular, “un burro lo es porque suele tener rabo, cuatro patas y además es un burro”, ¿usted se lo cree?, ¡Si!, diríamos los ingenuos y algún que otro monje de lo racional; pues tampoco; eso si, la construcción lógica es correcta, pero aquí se mete al calamar en el agua, se le da un buen susto y no vea usted como queda la cosa de transparente; o sea, a escupir notas como esa, balones fuera y pelillos a la mar, fétidas argucias que suelen terminar con algún Presidente digno y equipo veterinario coherente contusionado y con varios pelos pinzados en la gatera. El resto de la crónica de ese ilustrativo día, lo sabido; corrala pura y dura con toda su guarnición y a la que tan acostumbrados nos tiene en ocasiones algunos apoderados de las figuras; léase, , presiones de albañal al Presidente, dardos verbales, puñales cacofónicos y motín alpargatero con plante incluido.

Seguimos, más sobre la nota falsaria, “los toreros y cuadrillas dan por hecho las disculpas del Presidente”; según se colige de la tal cosa o nota, preguntamos ¿cuando se disculpo el Presidente?, ¿De que?, ¿Qué reflejo calvinista es ese que se pide contrición al que debe ser indemnizado?. rotundo no, si de algo es responsable el Presidente y su equipo, es de haber agotado el diálogo ante una situación imposible; más, haber cumplido con su deber y restañar el prestigio de la Plaza y el respeto debido a los aficionados y además haber salvado la corrida con un mínimo de dignidad, !vaya por ti Presidente y por tu equipo!; el resto, si alguien tiene que pedir disculpas que hagan acto de contrición y propósito de enmienda, los que imponen condiciones y desembarques infumables por esas plazas de Dios sin freno ni santo temor alguno-aquí nos volvemos todos religiosos-. Gracias de nuevo Presidente.Por ultimo el autentico cáncer de la tauromaquia es la adulteración del espectáculo; monstruoso poliedro de mil caras, ¿el publico deserta?, ¡naturalmente!, sometido a un ballet vacuno vaciado de toda tensión y escalofrío. Jamás discutiremos la grandeza de una figura del toreo; aún mas, hasta el último y fracasado novillero merece la mas excelsa admiración por haber sondeado el escarpado sendero de la mas difícil y peligrosa de las artes; ¡pero señores, las reglas del juego son las que son!, si vaciamos esto de casta, fiereza y Toro y –a excepción de un ramillete de plazas de primera- las garantías son harto dudosas, dentro de poco no necesitaremos antitaurinos, nos bastamos solos para acabar con esto. Por eso, desde ANPTE, la lucha contra el fraude es nuestro principal objetivo, fraude de mil caras y tres rostros con muecas horrísonas: afeitado, doping y algo tan elemental como el fusilamiento sistemático de aquello, ¿recuerdan?: “trapío correspondiente, considerado éste en razón a la categoría de la plaza”, parece simple pero en ocasiones llega a ser épica de martirologio garantizar estos simples principios; sino que se lo pregunten a muchos de nuestros afiliados. Por eso y por mucho mas, gracias Presidente, gracias Rafael, hoy por hoy la Plaza del Puerto de Santa María está en buenas manos. Tus compañeros."