POR: César Jalón “CLARITO”
Crónica publicada en “El Liberal” el día 16 de mayo de 1920, referida a la corrida celebrada el 15 de mayo de 1920 en Madrid, en la que Joselito y Belmonte fueron fuertemente abroncados. Quiso el destino que esa misma tarde, a causas de una cornada que le infirió el toro -cornicorto y burriciego- “Bailaor”, de la Viuda de Ortega, moría en Talavera de la Reina, Joselito.
Texto extraído in extenso de “El Aficionado” : Órgano de expresión de la Asociación Cultural “La Cabaña Brava”, correspondiente al mes de octubre de 2010, N° 32.
¡Bravo! ¡Bravo! Las palmas atronaban el espacio. Flameaban los pañuelos. La alegría se desbordaba en la plaza. Abajo, en el ruedo, un mozo, un buen mozo vestido de luces, mostraba en una mano la puntilla ensangrentada y en la otra la montera. Era Josele, el puntillero de Joselito, que saludaba reverencioso y sonriente y a quien el concurso aclamaba. ¿Por qué? Por ¡casi nada!...Porque acababa de matar el toreo moderno, que en la quinta corrida del abono encontró ayer, a sus manos, la muerte que merecía ;murió a golpe de puntilla, sin un buen pase, sin una estocada. Así vivió y así era justo que muriese. Más tarde o temprano debía desarrollarse el espectáculo que ayer se ofreció a los ojos -creo yo que un poco espantados por la sorpresa- de nuestros forasteros concurrentes al festejo.
No hace aún dos semanas que, recogiendo otro momento de protesta del público, escribíamos estas líneas: “Los toreros de estos últimos años -las primeras figuras, se entiende-, con un instinto de conservación que los enaltece a los ojos de los humanistas y con un instinto industrial que los enriquece a los ojos de todos, han ido, no puede decirse que poco apoco sino a marchas forzadas, internándose en el terreno de las ganaderías; de tal manera, que, por sí y por sus encargados especiales, puede decirse que antes de torear una res en la plaza, la han toreado ya mentalmente en el cerrado; la han tomado a peso en la palma de la mano -tan poco suelen pesar-, la han examinado la nota, la han extendido, en suma, su filiación: nombres del padre y de la madre, edad, nota de buenas costumbres ,etc. Y han hecho más: han modificado lo que pudiera llamarse estructura de las vacadas, recortando la talla a las reses zancudas, corrigiendo las defensas de los toros cornalones…Le han quitado al enemigo el ímpetu, el vigor y las armas; el nervio, la carne y los cuernos…Un obstáculo tan sólo les quedaba por vencer: la edad, y en su ayuda y auxilio vino un reglamento que se traduce fielmente en los carteles con esa advertencia de ‘toros de cuatro para cinco años’. ¡Cuatro para cinco! Vamos, como la traviesa de un frontón…De acuerdo diestros y ganaderos, el toro va a desaparecer. Y, además, el becerro no va a ser bravo, porque, perdidos el escrúpulo y la afición, los ganaderos no seleccionan, no desechan para novilladas baratas los que como corridas caras les aceptan los diestros porque quieren y los empresarios porque…tienen que querer”.
Y resultado de esta lucha de todos contra el toro, y de que el público se ha percatado de ella, fue el espectáculo de ayer. Ayer habíase anunciado en los carteles una corrida de Albaserrada. Por la mañana, un avisito comunicó al público que los toros de Albaserrada estaban cansados del viaje, y en su lugar se lidiarían seis de doña Carmen de Federico (antes Murube).No decía el aviso si estos Murubes estaban también cansados; pero era de esperar que no, porque en ese caso no había para qué reemplazar a los de Albaserrada. Pues salieron las cuadrillas -José, Belmonte y Mejías-; sonó una pita estruendosa; rompió plaza el primero de Murube, negro, fino, bonito, bravo y… y, ¡demonio!,al salir de los vuelos del capote de José, rematando una media verónica, el murube se cayó… Se inició la protesta. Tomó la primera vara y no pudo derribar. ¡Evidentemente, también estaba cansado! Y mucho más cansado después que los piqueros le pegaron sin dudo al infeliz. Y mucho más cuando después de banderillearlo dio de nuevo en tierra el débil bruto…Entonces ya la protesta se desbordó. Y a los silbidos acompañaron algunas almohadillas. Y fue al brindar Joselito cuando el revisteros observó la nota más simpática y definidora de la fiesta. Allí, en la delantera del tendido Diez, una linda muchacha, vestida de blanco, puesta en pie, increpaba al torero. Allí, en lugar muy próximo al de algunos incondicionales del torero, era una mujer la que volvía por los fueros de la fiesta.
-¡Toree toros; usted que dicen que puede! -me han asegurado que gritaba. En aquel instante fue una pícara almohadilla a dar en la faz del torero y no sé yo cuál de las dos cosas influyó más; pero el diestro, rápidamente, tiró la espada y la muleta:- Ea; yo no toreo eso…Y la Presidencia dispuso que se retirase el toro. Salieron los cabestros; condujeron al murube hasta la puerta de caballos y, cuando casi la había ya traspuesto, el bravo toro volvió a la plaza. Otra vez tornaron los cabestros y de nuevo el murube quedó en el ruedo. Tenía un fin que cumplir. Vio asomar por los tableros del Cuatro un capote y, bravo, se dirigió a él y lo siguió al hilo de las tablas hasta la puerta de caballos y, por tercera vez, detúvose el astado allí. Saltó el peón que guiaba el capote. Era Josele; el puntillero, el más modesto peón de la cuadrilla. Le embistió, derecho y templado, el murubeño y, en uno de los lances se humilló a sus pies, ofreciéndole resignadamente el testuz: -¡Apuntíllame! ¡Tú, el más modesto, el último de todos, mátame, sin pases de muleta, sin estocadas, sin nada de eso que debe reservarse para el toro bravo como yo; pero que tenga poder para defenderse! Y, cuando aparecían por tercera vez los cabestros, Josele, arrodillado en la cara del bravo animal, le hundió certeramente la puntilla. Fue un puntillazo que tiro patas arriba todo el toreo moderno, poniendo de relieve la mentira del torear sin toro.
Con ese mismo animalito, que un puntillero finiquitaba sin ninguna precaución, arrodillado entre sus astas, los ases hubieran epatado al concurso en provincias y aun en Madrid, cuando el público no estaba tan avisado, acaso hubiéranse dado el gusto de cortar unas orejas. Los otros murubes, unos más en tipo, como el primero de Belmonte, y otros menos, como el último de Sánchez Mejías, adolecieron del mismo defecto, de falta de poder y de caerse a cada momento. Fue protestado y sustituido el primero de Joselito. Protestado y sustituido el segundo de Belmonte. Y entre protestas y silbidos, transcurrió la corrida entera, sin que el público desarrugase el entrecejo, sino a medias, en el toro final, ante unos apretados muletazos de Mejías. Pero no hablemos de los diestros. La atención del espectador estuvo concentrada en el ganado. ¿Qué era aquello de los murubes? ¿Cansancio, también, de los viajes? ¿Resentimiento y molestias del cajón? ¿Glosopeda, mal de la pezuña? No. Falta de poder. Falta de temperamento, en los toros. Falta de afición y de escrúpulo en los ganaderos al seleccionar las madres o al escoger los pastos. ‘Sobra de sometimiento a los toreros, paja’. Sin que eso no quiera decir que alguno, como el quinto murubeño, estuvieron bien de los remos, porque tampoco los veterinarios se esmeran mucho en sus dictámenes y certificaciones.
Todo culpa del toreo moderno. Pero ya no debe durar. Yo estoy cierto de que Joselito y Belmonte, primeros culpables y primeros arrepentidos, pedirán, en desagravio, una corrida de Miura que la Empresa tiene adquirida. Y después otra de Pablo Romero. Y después… lo que sea. Todo menos “toreo moderno”. El torito moderno no puede pasar ya. Lo apuntilló Josele, frente al Cuatro. Y si no, lo hubiese apuntillado con el gesto aquella linda dama, vestida de blanco, que desde el Diez nos enmendaba la plana a los hombres, pidiendo virilidad para la fiesta…
A pesar de los años,la forma de hacer una crítica de la corrida,lo dejó demostrado Clarito.
ResponderEliminarLo primero que se tiene que ver es al toro,porque si solamente se ve al torero,la crítica no es buena.
Respecto a los tres grandes mencionados,se enfrentaban a hierros duros y a veces elegían una corrida para cortar orejas,pero en las difíciles demostraban su maestría.
P.D. Hoy en día, más de un pseudo cronista baratero y gilipollas,llama a cualquiera de estos adocenados pegapases,"maestro"¿?
Surco Taurino.
Ya desde 20 se fraguaba el fraude y el engaño, teniendo a Belmonte como gran pionero, pero bueno, solo espero que estos que nos critican a los que somos objetivos y nos damos cuenta quieren hacernos creer algo que nunca se da en una plaza, de ejemplo el imbécil de Moles o el estafador de Simón Casas (tenía que tener nombre de traidor), lo que importa es que si ya desde esos años se veía a los precursores del engaño y ahora tenemos a nuestros propios vende humo, que buen artículo muy bueno. Este año vamos a hacer sentir nuestra protesta no por molestar, sino por mejorar nuestra fiesta rescatarla de es estos ampones de quinta.
ResponderEliminarEl chofre de Pamplona (SJM)
Glosopeda es la fiebre aftosa, es una enfermedad contagiosa de etiología vírica (aphtovirus), de curso agudo, que afecta a animales fisípedos(dedos partidos) y que se determina la formación de aftas o vesículas en la piel de los belfos, ollares y jeta, mucosa oral (encías, rodete dentario y lengua), piel del rodete coronario e interdigital y, ocasionalmente, en los pezones.
ResponderEliminarSin embargo, la Fiebre Aftosa continua representando en la actualidad un serio problema sanitario en amplias zonas del mundo, y el control de esta enfermedad se ve dificultado por poderosos factores socio-económicos.
Wilfredo Quiroz Campana
PT10 - Chalhuanca - Perú
Ah me olvide en esta feria tendremos una serie muy bonita se llamara.
ResponderEliminar"SIN AFEITADO NO HAY PARAISO"
Ahora que cacaseno, saltará hasta el techo por esto.
El chofre de Pamplona (SJM)
La serie cae a pelo, el tema es delicado para el jeque, ya que los figuretones de la ultima TODOS EXIGEN AFEITADO, ahora muchos saltaran hasta el techo cuando el los miembros del diez pidan las cabezas de manera personal, pero como es la ultima corrida a los figuretis pegapases no les interesa y losn chupamedias del negro mama, ferrando gay, monica delta ocultaran el escandalo diran "no hay protocolo" el juez digitado por taurolima se hara el cojudo por el "bien de la fiesta" y regalara orejas que previamente un emisario ira a cobrar el cariño a los apoderados al hotel ese mismo día el candelejon (solo la cara ya que es mas vivo que las arañas)reventará el telefono de los miembros del consejo taurino para que esa mismanoche otorguen el escapulario y paralelamente el jeque se otorgara el suyo y la omnipresencia para la entrega de ambos: MONICA DELTA y como pajes los asexuados llenado de florituras la feria en su facebook. Que asco da todo esto. Quiero ver otros aficionados que aguanten mecha ante la matoneria para denunciar todo el fraude como lo hizo el 10 en el 2007 desde el consejo denunciando el afeitado (por eso arrugo el juli en la ultima)e igual el amorfo de salomon los desalojó a patadas del camal la ultima corrida y me acuerdo que el veterinario de puga arrugó a estar presente (eran toros mejicanos), en el 2008 sacaron a tapia y su gente a patadas de la plaza por orden del amorfo y direccion de la secretaria de taurolima (le han puesto de apodo olivia de cono je, je,)y en el 2009 fue patetico como el jeque mandaba a un abogado flaquito a coimear al fiscal y a la juez para que lo saquen, (me entere que la empresa safó del tema reconociendo sus culpas del 2008 en la fiscalia con una argucia legal que utilizan los abogados). Tocayo: hay que hacer un frente con nuevos aficionados y seguir a los del T10.
ResponderEliminarHaber quiero ver que dicen los anonimos sobre este tema y en especial quiero ver que dice el adulon del jeque, las gordas sinforosas y los rosqu..., perdon los asexuados del facebook, no pido opinión de los inmorales del prensa(?) ya que si dicen u opinan algo del tema pierden susu acreditaciones. (que asco me dan el negro mama el rey de las polladas profondos bolsillo C. castllo de arenas y denas arrastrados).
El Chofre del Rimac
¿ Comentarios del artículo.?
ResponderEliminarPor favor,a preocuparse de la ortografía.
Gracias.