Peña Taurina Tendido 10

domingo, 12 de junio de 2011

PELIGRO SORDO.... MUDO COMPRADO

SEGIO TAPIA HELFER

Regresábamos luego de una muy linda reunión en la PT10. Estábamos en mi auto, las agujas mercaban 1.30 AM, 60 KMXH y el sueño arreciaba. La neblina y el frío arropaban la noche, luego de 5 horas de tertulia con el resto de la gente, entre vinos y piscos. Habíamos hablado de toros, política, historias, toreros, toros... en fin. Que linda banda de amigos, los cabales!.

Ya en el bólido rojo quedábamos solo 3 (el que intenta escribir, Gimo, y el "Ave Verde"), los comentarios finales de una noche muy taurina nos llevo a analizar aquello del "PELIGRO SORDO". Frase que encontramos cada vez más frecuentemente en crónicas taurinas negociadas. Cuando un toro trae por la calle de la amargura a algún torero de esos que llaman figuras, inmediatamente salen con lo de peligro sordo, todos aquellos a los que yo llamo "MUDOS COMPRADOS", pues callan la verdad, por un fajo de favorcitos, un capotito firmado o la gracia que el torero se acuerde de su nombre el año siguiente.

Desde que era chico y venia a los toros, siempre escuche que un toro podía ser manso o bravo, pregonao, de bandera, descastado, geniudo y hasta asesino con sentido. Peligrosos son todos, siempre. Incluso los más "bobos".

Pero esta manga de "Mudos Comprados". Ellos que callan las verdades, y hacen eco de lo que dicen los apoderados o los propios matadores, cada vez que sale un toro un poco más difícil de lo que se imaginaban, o que pone al descubierto sus falencias de valor, conocimiento y arte, entonces lo etiquetan inmediatamente.

Nos quieren decir que los toros tienen un peligro que nadie puede ver. Que como no acuden como "bobos" al cite por fuera de la muleta y se les cuela por el huecazo que dejan al destorear, entonces son toros imposibles. Esos mismos toreros que son incapaces de emocionar a un tendido con sus trapazos deslucidos, ellos nos quieren dar excusas para sus limitaciones. Entonces surge un riesgo que solo ellos y sus apoderados pueden ver. Como si tuvieran en su vista ojos biónicos capaces de reconocer aquello que nadie ve. Y como tienen que convencer a los cientos de turistas que van a una plaza, entonces les dicen: "ese tenia peligro sordo".

Un riesgo que se ve desde el callejón, y solo desde el burladero de los empresarios y apoderados. Porque cerca a toriles ya se complica esa visión. Ni que decir de barrera y contrabarrera, ya no se puede percibir claramente. Y para los que nos sentamos en fila 13, en la mitad de a plaza, pues eso ya es imposible de ver.

Entonces los "toretes" que no acuden como zombies a su muleta, para ellos son unos animales feroces, imposibles de torear que no tienen ni un pase y tenían "Peligro sordo". ¨Por supuesto que solo ellos ven, poco evidentes para un buen aficionado.

Ya pues coleguitas, mis queridos "Mudos Comprados" dejen de engañar al público. Todos los aficionados que vamos a la plaza, recalco "AFICIONADOS", sabemos que cosas vemos en la arena, desde que sale por la puerta de chiqueros hasta que se va al desolladero.

Eso de peligros sordos, tuertos, mancos, o con cualquier otra discapacidad que quieran atribuirle al pobre toro, no es mas que la incapacidad de un matador, para con un toro que lo llevó por la calle de la amargura.

1 comentario:

  1. Bien por el artículo,Sr:Tapia Helfer.Muy certero en su apreciación, es lo que pretende la prensa servil, mentirle al nuevo aficionado en la busca de tapar las limitaciones de los llamados "figurones".La culpa de sus desaciertos, esta gleba la achaca al toro de lidia -bravo no es-,el otro manido argumento es:no tiene transmisión,era contraestilo,buscaba debajo,no fue agradecido y otras tonterías.
    Las figuras no deben ir aliviadas en lo que a encastes se refiere.A los toreros buenos se les recuerda por sus gestas.

    E.A.V.

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